Hace veinticinco años, Lo que la vida quiera, novela que siguió a la deslumbrante ópera prima que fue Almamocha, confirmó que la reconocida cineasta colombiana Bella Clara Ventura llevaba dentro una escritora singular que tenía mucho que decir y una forma personalísima de hacerlo. Sial Pigmalión recupera hoy esta historia de amor y vida porque sus páginas siguen conservando la verdad, la inteligencia, la emoción, el humor, la fuerza y la frescura con que fueron escritas y su mensaje sigue siendo igual de potente y necesario en pleno siglo XXI