«Sin ninguna duda, mucho mejor que Lolita e infinitamente más divertida».
Jessica Schnaider, New York Review
Sinopsis
La vida de Joji, un oficinista soltero de carácter tranquilo, da un vuelco cuando conoce a Naomi, una hermosa jovencita que trabaja como camarera. Deslumbrado por su peculiar belleza de piel blanca y rasgos casi occidentales, Joji se ofrece a costear su educación al tiempo que se dedica a instruirla en las nuevas modas del Tokio de los locos años veinte con el secreto objetivo de hacer de ella la mujer ideal. Sin embargo, poco a poco, la muchacha tímida e inocente se va transformando en una mujer moderna, exigente y vanidosa que está firmemente decidida a comerse el mundo.
El amor de un idiota es la crónica en primera persona de un hombre ciego ante los peligros del amor pero, también, la reivindicación de una relación diferente y poco convencional. Tanizaki se sirve de unos personajes tan divertidos como complejos para contar la historia de una insólita pareja en una época vibrante en la que Japón cayó rendido a los pies de las modas occidentales.
Tanizaki Junichiro
Tanizaki Junichiro (Tokio, 1886-1965), piedra angular de la literatura contemporánea japonesa y eterno candidato al premio Nobel, cursó estudios literarios en la Universidad Imperial. Autor fundamental para el entendimiento mutuo entre Oriente y Occidente, conoció en profundidad la literatura occidental y se dejó empapar por su influencia: Poe, Baudelaire y sobre todo Oscar Wilde. Al final de la década de 1920, Tanizaki se trasladó a Kansai, donde descubrió la cultura clásica nipona y la belleza del Japón premoderno. Publicó por entonces La historia de un ciego, Sobre Shunkin y La vida enmascarada del señor de Musashi, obras que beben de la tradición japonesa clásica. Durante la guerra, sufrió la censura en trabajos como Las hermanas Makioka, que se convertirá en uno de los grandes éxitos de posguerra. En 1949 recibió la Orden del Mérito Cultural en reconocimiento a su labor literaria. Prolífico escritor, Tanizaki continuó trabajando de manera incansable hasta su muerte.