Cuando nací ya existía ese sordo rumor: alguien tejía, no supe nunca quién (¿tal vez una vecina, una mujer de negro olvidada ). No importaba era siempre ese sordo sonido que iba y venía en un cuarto lejano. Lo he oído por años. Cuando nació mi hija todas estaban alrededor de mí: yo buscaba qué era lo que faltaba era ese sordo ruido. Alejé entonces con mis propias manos el paño fresco de la frente y dije a las mujeres que una de ellas fuera a un cuarto lejano y se sentara al telar. Fue así que volví a oírlo, y hubo de nuevo aquel escandido silencio. Mi hija nació en ese silencio. «La madre», de Mirella Muià Mirella Muià nació en Siderno (Calabria, Italia), en 1947. En 1989, luego de su conversión religiosa y de largos años de residencia en París, decidió regresar a su tierra de origen, donde trabajó en la cátedra de Literatura Francesa de la Universidad de Calabria. Desde el año 2002 vive en la ermita de la Unità, junto a la iglesia de Santa Maria di Monserrato, sobre la costa del mar Jónico, allí fundó la Oden del Eremo dell'Unità de la Diócesis de Locri y Gerace. Ha publicado dos libros de poesía, La Toile