Ayes Tortosa, continuando en la línea de algunos de sus anteriores libros: ?Los
cuentos de María del Charco? y ?Los cuentos del Albaicín?, tan cercanos a ese modo
árabe y judío de concebir la narrativa, nos sumerge ahora en la esencia de lo
Mediterráneo (un mundo que no es sólo un paisaje, una luz, un aroma, un sonido... es
sobre todo un paisanaje, una actitud ante la vida).
Los personajes de este libro -tratados con gran afecto y humor- son reales, al
igual que sus historias: Don Leandro pacífico estudioso del tao que, puesto a prueba,
abandona las lecciones de su maestro; don Mariano que persigue los veranos; doña
Adela y doña Rufina, románticas aristócratas cuya casa se hunde ?literalmente- entre
el cemento, el pragmatismo y el mal gusto; el señor Horacio, que llegó con sus maletas
cargadas de libros y puso una librería a la orilla del mar; la joven Simone y su amor
¿imposible?; Enrique, el barbero, que un día perdió el arte de la conversación; doña
Lola, una gran desconocida, como en realidad somos todos...
No se esperen épicas historias de piratas y fenicios, ni te